La había conocido en el bar La Mariposa Caliente. Ella estaba en una mesa que daba contra la ventana. Yo veía de Chatelet Les Halles. Esa tarde había comprado un par de discos. Rock Sur La Blanche y otro de The Psychomodo en una tienda musical llena de negros de la banlieu de la Plaine-Voyageurs que escuchaba melodías de Senegal. Entré al bar y pedí una cerveza fría. Encendí un cigarrillo y me dediqué a observar a esa mujer vestida de negro que miraba por la ventana hacia la calle. Cuando la vi supe inmediatamente que era una mujer-lluvia. Una mujer- lluvia. Una mujer-húmeda. Una mujer-lluvia se distingue a leguas por su forma acuática de mirar, por sus formas suaves, por el control transparente de su piel, por la forma como humedece poco a poco el aire circundante con sus manos, con sus babas, con sus ojos, con la lluvia secreta que sale de su cuerpo. Yo la mire y mis ojos se fueron hacia el centro de su corazón que flotaba en medio del reflejo incierto de su sangre sobre su rostro. Mierda. Una mujer-lluvia. Después me le acerque y charlamos un poco de libros, de universidad, de la comida china, de cine. Interesante. Otra cerveza. Otra. Un cigarrillo. Sueños dulces. Dulces sueños. Interesante.
Alfarero
Hasta entonces Dios había inventado y fabricado todo a cautívate, puñetazos, hachas y martillos. Pero cuando decidió hacerte a ti se convirtió en alfarero, puso sus manos en tus caderas y curvas, en los senos y las nalgas. Cuando te hizo a ti giraba su rueda, mojaba sus manos, y estaba largas horas moldeando tu cuerpo perfecto, y pocas veces ha querido ser tan perfecto. Curaba con el fuego las tangentes de tus clavículas, pulía los pómulos a pulso precisó, e incluso él estaba nervioso. Terminó lleno de placer, cada vez, de principio a fin. Yo lo supe cuando te vi así, acostada en la cama. Y también sabía que había probado lo que solo algunos dioses privilegiados podían. Y hasta ahora no sé si soy algún elegido, mesías o caso de singularidad… no importa si lo soy, después de ti estoy preparado para simplemente dejar de ser.
Comentarios
Publicar un comentario
Dame tu opinión